Buscando a Alaska

Buscando a Alaska (2014)

John Green

297 páginas 

El título de este libro es intrigante, y el hecho de esté escrito con una cuenta atrás lo hace aún más interesante, ¿qué pasará el día cero?

SINOPSIS:

Antes: Miles ve cómo su vida transcurre sin emoción alguna. Su obsesión con memorizar las últimas palabras de personajes ilustres lo lleva a querer encontrar su Gran Quizá (como dijo François Rabelais justo antes de morir). Decide mudarse a Culver Creek, un internado fuera de lo común, donde disfrutará por primera vez de la libertad y conocerá a Alaska Young. La preciosa, descarada, fascinante y autodestructiva Alaska arrastrará a Miles a su mundo, lo empujará hacia el Gran Quizá y le robará el corazón...

Después: Nada volverá a ser lo mismo.

OPINIÓN (sin spoilers):

La forma de narrar de John Green en este libro consigue que, a veces, con determinados temas, no llegue a entender si algo es relevante o no en la historia. 

Me pasó algo parecido con Ciudades de Papel. Veo las críticas tan buenas que tienen estos dos libros y no sé si el problema lo tengo yo que no llego a entenderlo.

De la historia en sí me ha faltado algo para engancharme. Al principio es la cuenta atrás, estás esperando a que suceda algo mientras pasan los días, pero hay partes que se hacen pesadas y parece que no avanza. Es bastante monótono, con algún que otro pico algo más intenso, pero no sabes si los detalles que ocurren van a tener trascendencia a lo largo del libro o no.

Algo que me ha gustado mucho son los puntos de humor. Los personajes principales están bien definidos, junto a su sentido del humor. Mi favorito ha sido el Coronel.

También me ha gustado la reflexión que hace Green con el enigma del laberinto, y cómo salir de ahí. Se va tratando a lo largo del libro y te hace pensar. 

CONCLUSIÓN:

Creo que tenía las expectativas demasiado altas. 

En sí el libro no está mal, pero lo esperaba diferente, no lo recomendaría.

NOTA: 2.8

A la historia le doy 1.5/3.

A los personajes 0.7/1.

El estilo del autor 0.6/1.

Raquel.